Dar lugar a lo nuevo

Luna llena en Aries (bharaṇī nakṣatra)

Día: 05/11/2025

Hora: 10:20 am

(Hora local Argentina)

Está Luna llena se dará dentro del signo de Aries, y esta puede ser una situación un poco conflictiva. En un nivel, el temperamento será ardiente y las emociones estarán hirviendo la mayor parte del tiempo, porque la Luna es agua y Aries es fuego, y no hay forma de que estos elementos se relacionan bien. Los karmas que manifestará estarán conectados a situaciones bélicas donde podremos tomar decisiones muy emocionales, rápidas y decisivas. Por eso, bajo esta posición, nos gustará conseguir cosas, no querremos perder el tiempo con nada, es una posición de la Luna muy orientada a la acción. La Luna gobierna la mente, y la Luna en Aries está regida por Marte, entonces, la mente será determinante y concentrada en hacer las cosas que necesitamos. El mayor deseo de está posición es la libertad. Necesitaremos sentirnos libres, independientes, sentir que podemos avanzar por nuestros propios medios sin importar la competencia, de hecho, con la Luna en Aries disfrutaremos de la competencia. Y esto viene de esas situaciones peligrosas pasadas en la que todo estaba lleno de adrenalina y en las que teníamos que tomar decisiones en la desesperación del momento, de lo contrario, nuestra supervivencia podría haber sido amenazada. A pesar de esto, nos dará una naturaleza directa para ir hacia adelante, es una posición súper independiente, como ya he dicho, donde buscaremos hacer todo por nuestra cuenta, es una posición muy emprendedora, por lo tanto no tendremos miedo de correr riesgos, pero tan pronto nos sintamos restringidos, nos sentiremos vulnerables y las emociones hervirán. Es aquí donde estarán los problemas. Por otro lado, esta posición puede empujarnos a estar muy centrados en nosotros mismos. La Luna en Aries se trata de lo que uno necesita (no de lo que otras personas necesitan). Esto puede ser muy dominante. Por lo tanto, con la Luna en Aries, deberemos trabajar la visión equilibrada y ser más conciliadores.

La Luna en Aries se encontrará dentro de la constelación de Bharaṇi. Está constelación representa la unión de lo femenino y lo masculino reflejando el potencial creativo. Su deidad es Yama, el Dios de la muerte, por lo tanto Yama traerá el fin/muerte de un ciclo, un evento, una actividad, una relación o un estado interno. El símbolo de Bharaṇi es el órgano de reproducción femenino. También se lo representa como una vasija hecha de arcilla que sirve para contener las fuerzas creativas. Esta posición se llama la estrella de la contención, que refleja la sensación de estar enredado en el mundo de los deseos y la ilusión. Bharaṇi también significa dar a luz o la que da luz, lo que indica la necesidad de paciencia, trabajo duro y disciplina. El símbolo animal de esta constelación es un elefante macho, que refleja la capacidad de llevar la carga de la humanidad. Yama significa "el recolector", y guía nuestra alma, aquí uno puede experimentar el resultado del karma de la vida presente y prepararse para la vida venidera. Yama es la deidad del sacrificio y la disciplina. Bharaṇi tiene el poder de limpiar y eliminar las impurezas. La sombra de Bharaṇi es una experiencia de lucha y sufrimiento. Esta es la "estrella de la restricción", ya que puede relacionarse con el encarcelamiento y otras formas de confinamiento psicológicas. Por lo tanto, bajo esta posición, podremos tener una naturaleza inquieta, irritable, impaciente, y llevar todo al extremo. Pero debemos recordar que el parto (proceso creativo que da luz) también está asociado a un momento de transición. Piscis, el signo anterior a Aries, es un signo acuoso. Marte es una flecha hacia afuera haciendo fuerza, estando listo para romper lo que hay que romper para dar a luz a lo nuevo. 

La clave de esta lunación reside en nuestra capacidad de detener todo este movimiento tan autónomo, abrasivo y mecánico para transformarlo en una fuerza innovadora que nos ayude a salir de donde estamos y emprender nuevos ciclos de conciencia, pero evitando la tendencia a estar proyectándonos constantemente a un futuro que no existe, que está basado en fantasías, y nos impide conectar con lo simple de la vida. 

El desorden exterior corresponde a un enorme anhelo de hallar la unidad más allá de la realidad cotidiana. Las luchas, los finales y la inseguridad en general, contribuyen a que se inicie una nueva etapa de piedad, caracterizada por una mayor atención con nuestro trato con Dios, en el anhelo de hallar la unión más estrecha con lo transcendente. 

“Cuando un sabio ve esta gran unidad, y su ser se ha convertido en todos los seres. ¿Cómo va a verse afectado por la perturbación y el pesar? (Īśa Upaniṣad - Verso I-VIII) 

Om namaḥ Śivāya